¿Qué es el mindfulness para niños?


Mindfulness es prestar atención de forma intencionada al momento presente y sin juzgar. Es la capacidad humana que consiste en la posibilidad de ser conscientes de los contenidos de la mente momento a momento.

Las intervenciones basadas en mindfulness (haciendo uso del proyecto “¡Qué gusano más travieso!”) pueden mejorar la salud (física y mental) y el bienestar emocional de los niños y adolescentes que participan en ellas.

Cuando se habla de mindfulness no nos referimos a un rasgo, sino a un estado,  que requiere de las siguientes actitudes: aceptación, sin juzgar, mente de principiante, vivir el presente, soltar, bondad amorosa, compasión y autocompasión.

Son tres los grupos de prácticas básicas: de atención, de consciencia corporal y prácticas integrativas (o la atención plena en la vida cotidiana).

Además, están las prácticas de aceptación (dirigir la atención a lo que ocurre en el momento presente con el compromiso de experimentar la realidad tal como es, sin resistencia) y de compasión (ser testigo del dolor y responder con amabilidad y comprensión).

¿Qué es?

  • Es mantener viva la conciencia en la realidad del presente.
  • Es prestar atención de una manera especial: intencionadamente, en el momento presente y sin juzgar.
  • Es la capacidad humana universal y básica, que consiste en la posibilidad de ser conscientes de los contenidos de la mente momento a
    momento.
  • Es una forma de conciencia centrada en el presente no elaborativa, no juzgadora en la que cada pensamiento, sentimiento o sensación que surge en el campo
    atencional es reconocida y aceptada tal y como es.
  • Es la observación no enjuiciadora de la continua corriente de estímulos internos y externos tal y como surgen.
  • Es la conciencia de la experiencia presente con aceptación.
  • Es la tendencia a ser conscientes de las propias experiencias internas y externas en el contexto de una postura de aceptación y no enjuiciamiento hacia esas experiencias.
  • Es un estado, más que un rasgo, que requiere, según Vicente Simón, de las siguientes actitudes:
    • Aceptación de la realidad que ya existe y que estamos observando en ese momento. Es lo contrario de la resistencia.
    • Sin juzgar aquello que se observa.
    • Mente de principiante, cuya esencia es la curiosidad y la apertura mental ante lo que percibimos y experimentamos.
    • Vivir el presente, lo que significa que el pasado y el futuro se nos van haciendo innecesarios.
    • Soltar (no aferrarse a las cosas o las experiencias).
    • Actitud afectiva de bondad amorosa o actitud de amor o de cariño hacia el objeto observado.
    • Compasión (no lástima) cuando esa bondad amorosa se dirige a personas que experimentan cualquier tipo de sufrimiento.
    • Autocompasión cuando esa bondad amorosa se dirige hacia uno mismo.

Fuente: mindfulness en niños y adolescentes

DESCARGA:¡Qué gusano mas travieso!

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